viernes, 5 de febrero de 2021

EL ALOE PISA FUERTE

 Marisa y Raúl Adami llevan adelante un emprendimiento familiar e innovador en la localidad de Vilmer, Santiago del Estero. Allí cultivan desde hace 7 años el aloe vera para consumo humano a base de mermelada. “Nos comentaron sobre los beneficios de la planta y así fue que empezamos a investigar. Compramos plantines en Córdoba y los plantamos sabiendo que teníamos que esperar mínimo 5 años hasta que la planta adquiriera su madurez”, comenta Marisa, y agrega que con el apoyo de INTA lograron la habilitación del primer producto para consumo humano del aloe en Argentina, y la habilitación para comercializar el producto en las ferias nacionales. Ya la comercializan con la marca Radaloe.

En la Argentina, el cultivo de aloe se inició durante los 90, y hoy son cada vez más los emprendedores que se animan a producirlo y explorar sus propiedades.

Si bien la producción de los Adami no es muy grande, pusieron el foco en buscar que la planta aumente su producción para responder a la demanda, y para eso le ofrecieron plantines a dos amigos vecinos que ya tienen plantas listas para cosechar.


Para elaborar las mermeladas, la planta del aloe debe primero llegar a su estado de madurez, unos cuatro años o más, que es cuando la planta adquiere todos los principios activos necesarios. El primer paso es quitarle su tallo original y luego pasarla por un lavado para quitarle las impurezas, y para eso se debe trasladar a una planta para realizarle un tratamiento con agua cloral. La extracción de gel es totalmente manual, una vez recuperado el nivel permitido de gel, se realiza el proceso de cocción y se le agregan los demás ingredientes, para luego finalizar con el envasado.

La mermelada Radaloe contiene vitaminas A, B, C, D, B1, B2, B3, B6 y B12.

Más información: (20+) Radaloe Radaloe | Facebook